“De haber sido chico, me hubiese dedicado a la cesta punta”

Unas horas bastaron para agotar las entradas a la actuación que Vanessa Goikoetxea ofrecerá esta tarde en San Agustin Kultur Gunea. Para aquellas personas afortunadas que formarán parte del público, la soprano durangarra promete “una fiesta musical, con un repertorio variado y alegre”.

Estos últimos años han sido “muy potentes” para Goikoetxea, que tiene que repasar su agenda para recordar los escenarios por los que ha pasado. “Una vez acabada la pandemia, ha sido un sin parar”, reconoce.

El Liceo, el teatro Arriaga, Dresde, su éxito con ‘Tosca’ en Sevilla y Tarragona, su paso por Seattle… y eso sólo en los últimos meses. La próxima semana iniciará una gira por Galicia, después pasará por destinos como Niza o Limoges hasta afrontar su emocionante debut en el Teatro del Maggio de Florencia, el próximo año. Pero siempre logra sacar tiempo para estar con los suyos.

“Volver a Durango es regresar a mi hogar, con mi familia y mis amigos. Aquí me siento muy querida”, comenta. “Pero, a pesar de que estar aquí me aporta tranquilidad, siempre hay un extra de nerviosismo al cantar en casa, enfrente de mi pueblo”.

Un Durango al que se entrega no sólo con la música, si no también con su labor en la junta de la nueva escuela de cesta punta. “Es un proyecto que me hace mucha ilusión porque mi padre fue jugador y es un deporte que he admirado desde pequeña. Mi madre siempre dice que, de ser chico, hubiese sido cestista”, confiesa.

Para Goikoetxea supone una doble alegría ver como “las chicas están empezando a jugar, en un paso más para igualarnos en todo tipo de ámbitos. Es una pena que a mí me haya pillado con 40 años”, bromea.

Gala en tres partes

En la velada de esta tarde, la soprano estará acompañada por el pianista Rubén Fernández en una gala dividida en tres partes. “La primera estará dedicada a las canciones, la segunda a la ópera y la tercera a la zarzuela. Pero el leitmotiv de todas ellas será la fiesta, para celebrar el 25 aniversario de San Agustín”, adelanta.

El repertorio será “muy variado y alegre”, con guiños a Durango, al incorporar dos obras del compositor local Bartolomé Ertzilla en la primera parte. “De esta forma, también pondremos en valor a los artistas de la localidad que, a veces, están un poco olvidados”, sostiene.