La cultura japonesa vuelve a conquistar Amorebieta

La cultura japonesa ha llenado de color, un año más, las calles zornotzarras con los llamativos trajes de los cosplayers y lolitas. Atuendos que no pasan desapercibidos para los cientos de curiosos que desde el viernes se acercan al parque Zelaieta para conocer un poco más de cerca los secretos de la cultura nipona en la IX edición del Festival Mangamore.

Muchos repiten año tras año, pero otros, como las vitorianas Rebeca y Olatz han acudido por primera vez a Amorebieta tras conocer el festival de boca de un amigo. “Es la primera vez que venimos, pero seguro que repetimos. Es mucho mejor que el de Bilbao y es gratis. Además, está muy bien organizado con la acampada”, explican las jóvenes.

Uno de los grandes atractivos del festival ha sido el grupo superventas japonés Bless4 que animó a los asistentes con su concierto en el frontón zornotzarra. Un público entregado con barras fluorescentes cantó y se movió al ritmo de este grupo coral y de danza que han ocupado los primeros puestos en listas musicales como iTunes.

La consolidación del festival ha permitido incluir en esta edición nuevas actividades como el campeonato de Quidditch, conocido por la saga de Harry Potter. “Nos hicieron la propuesta de incluir este campeonato y pensamos que encajaba bien en Mangamore”, subraya David Murillo, organizador del evento. El campeonato se desarrolló en el polideportivo de Larrea con equipos de Cataluña, Madrid, Euskadi y Toulouse.
 

Más gente de fuera

A raíz de esta competición, la afluencia de gente de fuera ha sido mayor. “Este año ha venido más gente de fuera que nunca. Hemos hecho la acampada en el polideportivo de Larrea y no hay sitio en los hoteles del pueblo desde hace tiempo”, asegura Murillo.

Otra de las atracciones del festival ha sido el concurso canino Akita-Shiba Inu. 71 perros de esta raza japonesa, una de las más antiguas del mundo, participaron en el recinto acotado en Larrea ante la mirada de decenas de personas.

La oferta tecnológica también ha sido uno de los puntos fuertes. Además de las impresoras 3D, que fueron un éxito el año pasado, en esta ocasión el protagonismo se la han llevado las Oculus Rift. Las gafas de realidad virtual, que se podrán a la venta el año que viene, hicieron las delicias de los asistentes.
 

Humor amarillo

El festival de cultura japonesa reserva un espacio para los más pequeños de la casa. En ‘Ureshiland’ pudieron disfrutar de los castillos hinchables y los talleres para hacer dibujos. Los niños más mayores, por su parte, se han atrevido durante todo el fin de semana con las diferentes pruebas del concurso de humor nipón Humor Amarillo que “ha sido todo un éxito” y que, gracias al buen tiempo, pudieron realizarse al aire libre.

La participación de los zornotzarras en Mangamore es cada vez mayor, pero no sólo viéndolo desde fuera, sino implicándose en la organización. Un ejemplo de ello es la zornotzarra Yaiza Guerra, que ha realizado una exposición con dibujos en torno al manga.

Los hosteleros de la calle Luis Urrengoetxea también llenaron ayer sus barras con pintxos japoneses y hoy al mediodía será el turno de la exhibición de karate del grupo zornotzarra Ukabilak. Todavía quedan hoy muchas actividades por disfrutar y conocer de los japoneses hasta las nueve de la noche, en la que se dará por finalizada la novena edición de Mangamore.