La natación emerge en Amorebieta

Hace justo un año, Amorebieta-Etxanoko Igeriketa Taldea fue anfitrión de la Copa de Bizkaia de clubes y su equipo femenino quedó tercero en la clasificación final, obteniendo el mejor resultado de su historia. La piscina de Larrea ha vuelto a acoger este año la misma competición con un éxito sin precedentes: las nadadoras zornotzarras se proclamaron campeonas por sorpresa por delante del todopoderoso Getxo y los chicos, que competían por primera vez, quedaron séptimos.

“A pesar de que el Getxo es un equipo superior a nosotros, nos preparamos muy a fondo con una concentración en Lekeitio de todo un fin de semana dos semanas antes y presentamos un equipo muy compacto que sumó muchos puntos”, destaca Mikel Zabala, entrenador y director deportivo del club.

La progresión de Amorebieta-Etxanoko Igeriketa Taldea, un club fundado en 2010 que cuenta actualmente con 142 nadadores y presidido por Edu Lakuntza, ya empezó a ser evidente en el Campeonato de Bizkaia de invierno celebrado en febrero. Allí, consiguieron 47 medallas, de las que 17 fueron de oro.

Las nadadoras que lograron resultados más brillantes en esta competición fueron las infantiles Saioa Amorrosta y Araitz Zuntzunegi, con cuatro oros cada una; Nekane De La Hera, con dos medallas del mismo metal en categoría absoluta; la junior Elene Gutiérrez, con otros dos oros, y el infantil Iker Ramírez, que también se subió a lo más alto del podio en dos ocasiones. “Teniendo en cuenta todos los resultados, las chicas fueron segundas, un puesto que no habíamos conseguido nunca”, hace hincapié Zabala.

Los integrantes del Amorebieta-Etxanoko Igeriketa Taldea también habían destacado unos días antes, del 2 al 5 de febrero, en el Campeonato de España Master para nadadores de más de 20 años. El club, que participaba por primera vez con siete deportistas, vio cómo Nekane de La Hera conseguía cinco medallas –una de ellas de oro–; Nerea Fernández, una de bronce, y Leire San Nikolas lograba un meritorio quinto puesto.

Estos resultados hacen que las expectativas sean cada vez mayores, aunque Zabala prefiere ir poco a poco. “Lo más importante es incrementar nuestra base, la cantera. Tenemos bastante gente que empezó a nadar tarde y hay que tener calma. Es esencial ir formando a las generaciones de chavales y chavales que tenemos desde los 6 años para que con los años puedan federarse y tener un equipo completo”.