El Ayuntamiento de Amorebieta-Etxano destinará 1,3 millones de euros al proyecto de reurbanización de la plaza de Jauregizahar. Con un plazo de ejecución de seis meses, se busca transformar la zona en un espacio moderno y accesible, con mejoras en la iluminación y nuevas zonas verdes y de esparcimiento.
La alcaldesa Ainhoa Salterain ha afirmado que “el proyecto mejorará notablemente la iluminación y la visibilidad para incrementar la sensación de seguridad. Se creará un entorno con visuales despejadas y accesibles, complementado con zonas verdes y áreas recreativas equipadas con mobiliario urbano moderno. Este enfoque no solo mejorará la plaza, sino que también servirá como modelo para futuros proyectos de urbanización en Amorebieta-Etxano”.
La plaza de Jauregizahar “actualmente no cumple con los estándares urbanísticos deseados”, tal y como ha recordado el concejal de Urbanismo, Anartz Gandiaga. “Es necesario actualizar los itinerarios peatonales y renovar su diseño anticuado, que carece de una planificación que distinga adecuadamente las zonas de estancia de las de circulación, y no ofrece espacios idóneos para las diferentes climatologías”.
Además, según ha añadido, existen problemas como entradas a edificios con pendientes inadecuadas y una iluminación mejorable. Estos inconvenientes, junto con el deterioro de pavimentos y zonas verdes, “han mermado su estado”.
Árboles y plantas
Los principales objetivos serán, por lo tanto, “la protección y seguridad, con una perspectiva de género incluyente; la creación de un espacio que promueva el confort y el bienestar; y un diseño que sea accesible para todas y todos”. Para lograrlo, se mejorarán las visuales en toda la zona, asegurando que los recorridos sean seguros y fácilmente controlables.
Otra de las medidas clave será la prolongación del pavimento del pórtico, creando rutas alternativas y ampliando el campo visual, lo que eliminará puntos muertos y áreas de difícil control. También se incrementará significativamente la presencia de árboles y plantas, seleccionando especies que aporten “sombra, belleza y no obstaculicen la visibilidad, asegurando que sea un lugar seguro y acogedor durante todo el año”.
Zona de juegos
Tras estas actuaciones, la plaza será “un espacio de inclusión y accesibilidad. Vamos a crear zonas de descanso y agrupación, equipadas con bancos individuales y colectivos, pensados para el disfrute de toda la ciudadanía. La zona de juegos estará diseñada para ser segura y atractiva para niñas y niños de todas las edades, con juegos que respeten su desarrollo socio pedagógico”, ha descrito Gandiaga. Unos espacios que serán neutros y accesibles, incorporando juegos en pendiente y otras actividades lúdicas.
De igual modo, se garantizará la accesibilidad a través de itinerarios con rampas suaves y caminos integrados en la vegetación, “asegurando que todos los habitantes puedan disfrutar plenamente de la plaza”.