La ciudadanía berriztarra puede disfrutar ya del nuevo parque de chorros instalado en el entorno de Berrizburu. Junto a los juegos de agua, el espacio cuenta con una zona verde con sombrillas, fuente, bancos y papeleras, todo ello tras una inversión cercana a los 275.000 euros.
Tras finalizar el pasado abril con las obras de la instalación principal, que cuenta con un cerramiento perimetral en madera, el Ayuntamiento de Berriz ha trabajado durante los últimos meses en la segunda fase de actuaciones complementarias para añadir esta última zona de descanso. Además, se ha habilitado un sistema de riego automático y se ha realizado una preinstalación de una bomba a presión para poder ser utilizada en momentos puntuales.
Asimismo, para que el parque de agua y la zona de Berrizburu cuenten con las infraestructuras básicas, y mientras se coloca un baño público automático, se ha considerado oportuno la apertura de los servicos del campo de fútbol.
La puesta en marcha de los juegos de agua se llevará a cabo mediante pulsador, de forma que se activará sólo cuando se vaya a utilizar. Esto será posible de lunes a domingo, de 10.00 a 20.00 horas, hasta el próximo mes de octubre. Desde la administración local se solicita un uso con responsabilidad y respeto que garantice el disfrute de todas las personas.
El nuevo espacio acuático acoge elementos acordes a diferentes edades como chorros verticales de diferentes tamaños, dos cortinas de agua en espiral en forma de hélice y el novedoso elemento ‘Water Jorney-Tide Pool’ en el que se podrá jugar en un arroyo simulado o sentarse en rocas de varios tamaños.
Eficiencia energética
Respecto a su consumo, el parque ha sido habilitado llevando a cabo una actuación paralela de eficiencia energética. En concreto, se ha instalado un depósito enterrado de 20.000 litros que almacenará el agua procedente de los chorros que, mediante un sistema de bombeo, suministrará el riego del campo de fútbol. De esta forma se pretende aprovechar el máximo volumen de agua, minimizando el consumo de red.
En lo económico, la primera fase de la actuación contó con un presupuesto de 223.604,93 euros, de los cuales 55.960,20 euros procedían de una subvención concedida por el Departamento de Administración Pública y Relaciones Institucionales de la Diputación Foral de Bizkaia. La segunda fase de la actuación ha requerido de una nueva inversión de alrededor de 50.000 euros.