El Juzgado de lo Social de Bilbao ha declarado que la empresa AKT Plásticos de Amorebieta ha vulnerado el derecho a la huelga, según informa el sindicato ELA. La sentencia condena a la firma zornotzarra a abonar una indemnización por daños morales por importe de 12.400 euros a repartir por partes iguales entre las personas que secundaron el paro.
A mediados del pasado noviembre, la plantilla de AKT Plásticos –empresa que se dedica a la fabricación de piezas y componentes para la automoción, principalmente para el grupo Volkswagen– secundó un paro para desbloquear la negociación de su convenio.
La dirección “no quiso negociar y tomó tres decisiones que buscaban mermar tanto el derecho a la huelga como la libertad sindical: beneficiar a las personas que no la secundaban a través de acuerdos individuales, no abonar los salarios ya generados únicamente a los huelguistas, y sustituirles mediante contratación de personal eventual”, detalla ELA.
Estos hechos se denunciaron en los tribunales y el sindicato decidió continuar con la movilización hasta el día 24 de enero, fecha en la que se celebraba el juicio, “pese a los intentos de UGT y de la empresa para impedir dicha huelga”, añade. El sindicato LAB secundó el paro hasta el 8 de enero.
Mejorar el convenio
ELA valora muy positivamente esta sentencia, y considera necesario “seguir luchando por alcanzar un convenio de empresa que dignifique las condiciones laborales de las 140 personas trabajadoras de AKT Plásticos, con contenidos que mejoren sustancialmente el convenio estatal de químicas”.
Por ello, el sindicato emplaza a la dirección de la empresa a retomar el proceso negociador con la mayoría de los representantes del comité y “que cese en sus prácticas antisindicales”; y por otro lado, solicita a LAB que se reconstruya nuevamente una alianza para renovar el convenio.
Respuesta de UGT
Por su parte, portavoces de UGT han desmentido las acusaciones sobre sus intentos de impedir la movilización del año pasado. Tal y como señalan en un comunicado, el sindicato afirma que no secundó la huelga, “al considerar necesario someter la propuesta a una votación mediante voto secreto, para que el conjunto de la plantilla decidiese libremente”.
La Federación de Industria de UGT-Euskadi ha lamentado el “acoso” que han recibido sus representantes sindicales así como simpatizantes, “con insultos, amenazas y pinchazos de ruedas en los coches, algo que sin duda está fuera de las reglas del juego democrático”.