
El Juzgado de lo contencioso administrativo número 2 de Bilbao ha desestimado el recurso de dos asociaciones de comerciantes contra el Ayuntamiento de Durango por haber otorgado hace un año la licencia de actividad a AKÍ Bricolaje. Responsables de Dendak Bai y Bizkaidendak han anunciado su intención de apelar.
AKÍ Bricolaje abrió en mayo del año pasado un centro de 2.013 metros cuadrados en Durango que se convirtió en el segundo de esta enseña en Euskadi.
La Asociación de Comerciantes de Durango Dendak Bai y la Federación de Asociaciones Bizkaidendak interpusieron un recurso judicial al entender que la licencia que aprobó el Ayuntamiento de Durango incumplía el Plan Territorial Sectorial (PTS) al estar “agotada la edificabilidad máxima” en el sector Montorreta.
Tras repasar la sentencia, las dos agrupaciones han anunciado su intención de recurrirla “por el peligroso precedente” que supone para el comercio urbano vasco. Según dan a conocer, el fallo se limita a reseñar que en el plan parcial del Ayuntamiento de Durango los metros cuadrados de uso comercial de la firma no superan los 13.000 metros cuadrados, “sin analizar todas nuestras alegaciones”.
“La ley de la selva”
Desde Bizkaidendak y Dendak Bai consideran que este argumento “es rebatible” porque el PTS “que regula los equipamientos comerciales no se fija en lo que dicen los planes parciales, sino en los polígonos de actividad comercial”.
Las dos asociaciones añaden, además, que el propio Gobierno vasco “extiende el límite” del PTS a parcelas colindantes “que también tengan usos terciarios”, como queda demostrado en el expediente de Eroski en Azkoitia.
Por todo ello, y teniendo en cuenta la “incorrecta interpretación” del PTS que se ha realizado a su entender, van a apelar ante el Tribunal Supremo de Justicia del País Vasco. “No hacerlo supondría permitir la ley de la selva”, subrayan para recordar la necesidad de establecer límits a las grandes superficies.