Un hombre de 41 años fue detenido anoche en Amorebieta por intentar atracar un bar y salón de juegos con una pistola simulada. El individuo, que había encerrado a los clientes en el baño del establecimiento durante el asalto, se entregó al detectar la presencia policial.
Minutos antes de las doce y media de esta pasada noche, una patrulla de la Ertzaintza, que realizaba labores de seguridad ciudadana en Amorebieta, era alertada por un particular de que un individuo con un pasamontañas, y armado con una pistola, había entrado en un bar y salón de juegos de la cercana calle Karmen.
Ante la posibilidad de que se tratara de un atraco, la patrulla informó del suceso por emisora y se dirigió al lugar indicado. Poco después, se sumó una segunda dotación policial.
Los agentes realizaron una inspección del local desde el exterior, pudiendo ver cómo un individuo se aprestaba a salir del bar. El varón detectó la presencia policial y se dirigió de nuevo hacia el interior del mismo. Pocos minutos después, el hombre salió del establecimiento con los brazos en alto, aún con el pasamontañas, y fue controlado por los agentes.
Casi mil euros de botín
Tras esto, los ertzainas entraron en el local y comprobaron que las personas que se encontraban en el bar en el momento del atraco habían sido encerradas en el baño. Según su relato, el asaltante había entrado en el local cubierto con un pasamontañas y armado con una pistola y una barra de uña y les había confinado en el aseo mediante amenazas.
En la inspección del bar, los agentes localizaron la pistola, que resultó ser simulada, escondida detrás de una máquina. Acto seguido, encontraron la barra de uña. En el registro realizado al presunto atracador, los agentes hallaron una pequeña bolsa, un destornillador, unos guantes y casi mil euros en billetes, entre otras cosas.
Por todo ello, los ertzainas procedieron a la detención del sospechoso bajo la acusación de los delitos de robo con violencia e intimidación, detención ilegal y amenazas, y lo trasladaron a dependencias policiales.