Durango nombrará ‘hija adoptiva’ a la etnógrafa Gurutzi Arregi

El Ayuntamiento de Durango ha acordado esta tarde nombrar ‘hija adoptiva’, a título póstumo, a Gurutzi Arregi a petición de un grupo de vecinos de la localidad. La Corporación tiene la intención de dedicar un pleno monográfico el próximo 12 de noviembre –la fecha de su cumpleaños– a la reconocida etnógrafa, quien falleció el pasado mes de mayo en Orue (Amorebieta-Etxano).

Nacida en Lemoa en 1936, vivió en Durango desde los 4 años. Se licenció en Ciencias Sociales y Políticas por la Universidad de Deusto, donde se doctoró con la tesis ‘Origen y significación de las ermitas de Bizkaia’.

A lo largo de su trayectoria laboral fue directora del Departamento de Etnología de la Fundación Labayru y secretaria de los grupos Etniker Euskalherria, entre otros muchos cargos. Se dedicó a la etnografía desde 1972 bajo la dirección de Joxe Miel Barandiaran y el presbítero Ander Manterola.

Concejala tras el franquismo

Arregi formó parte de la primera Corporación democrática de Durango tras el franquismo, fue impulsora del Museo de Arte e Historia y secretaria de Gerediaga Elkartea en los primeros años de la asociación. También fue promotora de distintos movimientos culturales y de la ikastola Kurutziaga.

La petición para que el Ayuntamiento tenga este reconocimiento con la etnógrafa ha sido respaldada por un grupo de una decena de particulares, entre los que se encuentra Leopoldo Zugaza. Al no haber nacido en Durango, no puede ser ‘hija predilecta’, por lo que se le nombrará ‘hija adoptiva’.

El Pleno de Durango ha acordado hoy la incoación del expediente por unanimidad. Todos los grupos municipales han destacado que es “un honor” distinguir a una mujer como Gurutzi Arregi, con una trayectoria “intachable” en un “mundo de hombres” y que es necesario poner en valor su trabajo.