EH Bildu culpa al PNV de Elorrio de la paralización del plan parcial de Pulla-Azkarreta

EH Bildu de Elorrio ha hecho público un comunicado en relación a la paralización del procedimiento para implantar una zona industrial en Pulla-Azkarreta, que atribuye a una “monumental chapuza” del anterior equipo de gobierno municipal liderado por Ana Otadui y Joseba Mujika.

Los jeltzales habían prometido una inversión de 30 millones de euros para un polígono con 65.000 metros cuadrados de pabellones y crear 600 puestos de trabajo.

Según se asegura en el escrito de la izquierda abertzale, la paralización del Plan parcial elaborado por el PNV está argumentado por el juzgado en que “faltan informes preceptivos que fueron obviados por el anterior equipo de gobierno”.

Además de señalar al jeltzale Joseba Mujika como líder de la anterior corporación por no presentar los documentos necesarios, le responsabilizan tanto de la paralización del proyecto como de haber puesto sobre la mesa “un enorme problema político-jurídico”.

Prepotencia y amenazas

La paralización llevó al actual equipo de gobierno que lidera EH Bildu a mantener contactos con diferentes agentes implicados, entre ellos los responsables de SPRI, la sociedad que adquirió los terrenos para crear la zona industrial y quienes reconocieron que “a día de hoy no hay ningún plan para desarrollar Pulla-Azkarreta, ya que no hay ninguna empresa interesada en venir a Elorrio”.

Según sostienen desde EH Bildu los representantes de esa sociedad pública acudieron “con una actitud prepotente” y además amenazaron a los miembros del equipo de gobierno “intentando obligar a que hagan lo que ellos quieran”.

Ante la situación provocada por el anterior equipo de gobierno, los actuales mandatarios municipales proponen “volverse a sentar en torno a una mesa”, tal y como propusieron durante la campaña electoral, para adoptar decisiones “de forma reposada, meditada y compartida”.

Además señalan su intención de continuar “actuando con responsabilidad y con respeto hacia nuestro pueblo”, así como “tener en cuenta el contexto económico y la realidad del desarrollo urbanístico actual”.

Señalan por último que “si el PNV tiene un problema con SPRI, ése no es nuestro problema”.