Los vecinos y vecinas de San Fausto mantendrán su reivindicación de un centro cívico para el barrio en el caserío Kapitanena. Sus integrantes, que volvieron a acudir al pleno de esta semana, han descartado las dos alternativas que les ha ofrecido el Ayuntamiento de Durango.
En la reunión que mantuvieron con responsables municipales el 25 de enero, se les comunicó que Kapitanena “no cumple la licencia urbanística para su creación con ese fin y que ese cambio de licencia puede tener un tiempo de espera de entre uno y dos años”.
Aun así, siguen apostando por este edificio como sede del centro cívico porque creen que es la obra que a “más corto plazo” se puede acometer y porque consideran que es “la ubicación más correcta” al encontrarse “en un punto neurálgico para la vida de la comunidad” con el campo de futbito, las canchas de baloncesto, el frontón, la parroquia y la nueva zona de juegos infantil en los alrededores. Además, añaden, durante la legislatura pasada se acometieron mejoras en la estructura y la cubierta del caserío por valor de más de un millón de euros.
Sobre las razones económicas que esgrimieron desde Equipo de Gobierno para justificar la paralización del proyecto, al Centro Social San Fausto tampoco le convencen esas explicaciones. Kapitanena, un edificio con 190 metros cuadrados divididos en dos plantas, requeriría de una inversión de otro millón de euros, “pero tampoco nos han sabido decir” el coste de sus propuestas.
Las dos alternativas
Aunque el Ayuntamiento no especificó en su nota de prensa cuáles eran las ubicaciones que se habían planteado a los vecinos y vecinas de San Fausto, la asociación sí las ha desvelado. La primera alternativa, de similares metros cuadrados que Kapitanena, estaría en una zona verde “con un par de decenas de árboles plantados” entre las calles Gasteizatorre y Ramon Rubiales. “Es una finca que se encuentra en un desnivel pronunciado, lo que dificulta el acceso para personas de cierta edad y con problemas de movilidad”.
En este caso, prosiguen los afectados, habría que “empezar de cero y, como también hay que modificar la licencia, costaría mas de tres años que se haga viable”.
La segunda alternativa sería un local que se encuentra en el bajo de un edificio entre las calles Zirarmendieta y Bernardo Gabiola. “Es una construcción que aún no está proyectada y que no se sabe ni cuándo comenzará”. Por todo ello, han querido hacer público que descartan estas propuestas y mantienen su apuesta de que el centro cívico se acondicione en Kapitanena.
La misma asociacion de vecinos que dejaron tirar las escuelas y no hicieron absolutamente NADA.
P.D: La verdad ofende, ahora a borrar el post.
Viva la libertad de expresion.
Estos pagafantas de bildu no saben como defender al amo
Ya si eso, ..
Lo de mentir de los demás lo dejamos para otro día …