El Orfeón Durangués y la banda de música Tabira pondrán este fin de semana las primeras notas de la Semana Santa. La basílica de Andra Mari acogerá ambas actuaciones que comenzarán esta misma tarde con el acompañamiento del organista del Orfeón Donostiarra Gerardo Rifón.
El acto comenzará a las 20.30 horas y se desarrollará en dos partes. En la primera, el coro del Orfeón Durangués interpretará cuatro piezas clásicas: dos números del ‘Requiem’ de Mozart, un número del ‘Requiem’ de Fauré y el ‘Ave verum corpus’ de Mozart. Finalizará esta parte con la interpretación al órgano de una pieza de César Franck.
Para la segunda parte, el orfeón bajará al altar de la basílica y desde allí, acompañados por una orquesta de cámara formada por 16 profesores, interpretarán el ‘Gloria’ de Antonio Vivaldi. Bajo la dirección de Fernando Urain, el apartado lírico contará con las actuaciones de las sopranos Mireia Aranzabal, Irene Lasa y Jone Arana; las contraltos Ainhoa García y Amaia Basauri y el bajo Juan Carlos Aranzabal.
Joven promesa
La banda de música Tabira cogerá el testigo mañana, a partir de las 19.00 horas. En esta ocasión, estará acompañada al órgano por el joven de 18 años Mikel Ansola. Este intérprete de Markina ampliará sus estudios en Musikene a partir del próximo curso.
Con Luis Orduña como director, la banda ofrecerá un programa compuesto por ‘Mesopotamia (Marcha de procesión)’ de Jose Vélez García, ‘Himno Nacional dos terciarios Franciscanos’ de Juan Ignacio Busca de Sagastizabal, ‘Finale from Symphony’ de Camille Saint-Saens, ‘Canzona per organo’ de Kees Schoonenbeek, ‘La Madrugá’ de Abel Moreno y ‘Celebration fanfare’ de Satoshi Yagisawa.