
La empresa Fundiciones Garbi de Abadiño ha entrado en concurso de acreedores, declarado por el Juzgado Mercantil número 1 de Bilbao. La firma emplea en la actualidad a 140 personas y trabaja en un plan de viabilidad para mantener su actividad, han informado desde el sindicato LAB.
La fundición abadiñarra dispone de un activo patrimonial de 25 millones de euros —según el último balance disponible— y unas deudas de 15 millones. Tras la sentencia del juzgado, se ha nombrado administrador concursal a Grupo Sindicatura.
Dos años “duros”
Desde Fundiciones Garbi se trabaja para seguir con su actividad y superar esta situación “lo antes posible con el mínimo daño para la plantilla y los proveedores”, han señalado desde el sindicato. “Ahora mismo se está revaluando la situación con el fin de reducir costes y aumentar los beneficios para mantener la empresa”.
La situación de la firma vuelve a complicarse después de dos años “duros”, en los que ha sufrido dos accidentes laborables graves, con sendas amputaciones de brazo de dos trabajadores, y tres incendios en menos de un mes.