La BOS es la orquesta más antigua de Euskadi. Ofreció su primer concierto el 8 de marzo de 1922 en el Teatro Arriaga y, desde entonces, salvando dos años durante la Guerra Civil, ha mantenido su actividad de forma continuada. Con motivo de la celebración de los 100 años de su primera actuación, la Orquesta Sinfónica de Bilbao ha organizado una exposición itinerante que recaló ayer en Durango y que podrá visitarse hasta el 18 de mayo en el exterior del Conservatorio y la Escuela de Música Bartolomé Ertzilla.
La muestra está compuesta por una serie de 12 “puertas”, de 1 metro de ancho por 2 de alto, que van abriendo paso a las diferentes etapas de la historia de la Orquesta. Una de ellas está dedicada a la conexión de Durango y Durangaldea con la BOS. La formación ha actuado en 30 ocasiones en Durango, en eventos como el IV centenario de Fray Juan de Zumárraga y el centenario Orfeón.
Desde su fundación, esta orquesta ha tenido como directores titulares a Armand Marsick, Vladimir Golschmann, Jesús Arámbarri, José Limantour, Antoine de Babier, Rafael Frühbeck de Burgos, Alberto Bolet, Pedro Pirfano, Urbano Ruiz Laorden, Theo Alcántara, Juanjo Mena, Günter Neuhold y desde 2015 a Erik Nielsen.
La BOS tiene su sede en el Palacio Euskaduna de Bilbao desde 1999, donde desarrolla sus temporadas sinfónica y de cámara, además de actividades didácticas y de carácter social.
A la presentación de Durango acudieron la alcaldesa, Ima Garrastatxu, y la diputada de Cultura y Euskera, Lorea Bilbao. El acto concluyó con la actuación de un trío de cuerda formado por Laura Delgado, solista de violines segundos; Nora Bolinaga, violín primero; y Lander Echevarria.