El sindicato LAB ha acusado a la empresa Manufacturas Zeta, de Berriz, de despedir a tres empleados alegando falta de trabajo mientras obliga a otros operarios a ampliar sus jornadas laborales.
Los tres empleados fueron despedidos hace tres semanas pese a tener de 32, 31 y 11 años de antigüedad, respectivamente, en esta compañía, según Aitor Iturriaga, representante del Metal de esta central en Durangaldea.
Iturriaga ha lamentado que mientras la empresa aduce la necesidad de recortar plantilla porque falta trabajo, insta al resto de empleados a aumentar sus jornadas hasta las catorce horas diarias.
Para reclamar la readmisión de los tres trabajadores de esta firma, fabricante de moldes de inyección, han llevado a cabo concentraciones frente a esta planta y en los municipios vizcaínos de Zaldibar y Elorrio, donde residen los socios de la empresa.
Este sindicato, al que pertenece el único representante sindical de esta empresa, que tiene ahora una decena de trabajadores, ha anunciado que continuará las movilizaciones si la compañía rehúsa negociar la readmisión de los empleados.