La calle Luis Urrengoetxea ha cambiado de imagen dando paso a aceras más anchas y creando un entorno más amable para los peatones. Aprovechando estas obras, que han durado tres meses, también se ha renovado la red de abastecimiento y se ha adecuado la red de saneamiento.
El proyecto ha mantenido el mayor número de aparcamientos posible y una zona de carga y descarga “atendiendo a los intereses de vecinos y comerciantes de la zona”. Los trabajos se han llevado a cabo en cuatro fases dada la complejidad de un plan en el que las obras han tenido que convivir, tanto con el tráfico rodado, como con el peatonal.
El objetivo del proyecto era “mejorar el aspecto de la calle ya que es una zona del municipio muy comercial y transitada”, tal y como indicó el alcalde David Latxaga al comienzo de las obras. La inversión ha sido de 300.000 euros.
A falta de colocar dos baterías de contenedores de basuras soterrados y las luminarias, las obras estarán finalizadas en su totalidad.
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