Las personas mayores de Durangaldea se van de marcha

Caminar es una inagotable fuente de salud a cualquier edad. Y es una actividad que se disfruta especialmente si se realiza en buena compañía. Una característica que valora espacialmente el grupo de “senderismo experimentado” Bizibiltariak, formado por personas mayores con ganas de mantener una vida activa y compartir vivencias, paso a paso.

El germen de este grupo de “andarines” nació de las mentes (y los pies) de Gloria Santiago, Pedro Otaola y Juanjo Basterrika hace un par de años. El trío compartía su afición por el senderismo en el recorrido que organiza los viernes la asociación Bizidun de Durango, pero pronto sintieron el deseo de afrontar trayectos más largos.

“Nuestra idea era empezar a hacer rutas de 20 a 25 kilómetros y después de varias salidas se nos fueron incorporando más personas, gracias al boca a boca”, recuerda Basterrika. Para agilizar la organización de las caminatas, formaron un grupo de Whatsapp —“nuestro nuevo tam-tam”— con el nombre de Bizibiltariak.

Al crecer en adeptos, los coordinadores de esta iniciativa vieron la necesidad de planificar un calendario de salidas, tanto para evitar el solapamiento con otras actividades de Bizidun, como para ir concretando nuevos retos. Partiendo un miércoles de cada dos, los participantes en Bizibiltariak completaron la ‘Ruta del vino y el pescado’ en nueve etapas y realizaron otras tantas del Camino de Santiago, entre otras “escapadas”.

Más de 1.500 kilómetros

En 2017 realizaron un total de 22 salidas, en las que han llegado a alcanzar un máximo 54 participantes, y para este año prevén un número similar. De momento, llevan más de 1.500 kilómetros recorridos. “Es una afición sana que se realiza en total armonía y muy bien ambiente, lo que hace que la gente pida aumentar la duración y la dificultad de las rutas”, señala Basterrika.

Como muestra, el citado Camino de Santiago, la experiencia más ambiciosa de Bizibiltariak hasta el momento. “Nos juntamos en un grupo llamado ‘Santi Kamiñokua’ para organizar la ruta. En principio, pensábamos hacer solo el recorrido que pasa por Euskal Herria, pero la gente quería más”, comenta.

Para realizarlo, han dividido el camino en salidas de 4 días que el año pasado les llevaron hasta Llanes y este 2018 retomaron el pasado 28 de mayo, hasta Ribadesella. Calculan alcanzar Santiago el próximo octubre en unas pocas etapas más.

Pero disfrutar del camino en buena compañía no son sus únicas prioridades. “Damos una especial importancia a la seguridad y siempre caminamos en grupo y con los chalecos reflectantes puestos, lo que nos ha valido más de una felicitación por parte de transportistas y agentes de tráfico”, destaca. “También damos mucho valor a la incorporación de las mujeres en las salidas y estamos muy contentos con su respuesta”.

Seguridad y sonrisas

Pero por encima de todo está esa sensación de pasar unas horas en un ambiente distendido que les permite ganar salud y mejorar la calidad de sus relaciones. “Ver a un montón de personas mayores por la carretera, con los chalecos y los bastones, con paso distendido y caras sonrientes, hace girar muchas cabezas”, bromea Basterrika. “Y tras la caminata no falta una buena comida y unas animadas canciones acompañadas por una guitarra”.

Entre sus próximos desafíos están recorrer el Camino Ignaciano en diez etapas o completar la ruta de los montes bocineros el año que viene. Toda persona interesada en participar u obtener más información puede acercarse a la oficina de Bizidun en el Centro de Personas Mayores de la calle Astarloa de Durango. También se puede conocer en detalle los recorridos realizados en la sección ‘Bizibiltariak’ de la web bizidun.wordpress.com.