El proyecto inicial fue aderezado con un atractivo planteamiento más allá de la creación de un espacio recreativo y a él me referiré a modo de epílogo.
Durante estos últimos días hemos leído opiniones y vivido situaciones en el recién tramo puesto en uso de la bien denominada bici-pista.
La vía que enlaza Amorebieta-Etxano con Iurreta es un recorrido más apropiado para los ciclistas que para los viandantes, teniendo en cuenta sobre todo, que los peatones paseantes en su mayoría, aprecian más los caminos y veredas menos ruidosas.
Para una convivencia necesaria se hace imprescindible que los niños y los perros transiten bajo el control de sus responsables ya que la experiencia en otras vías similares en Bizkaia habla de incidentes desagradables, cuando no accidentes.
Aunque me considero un ciclista empedernido, para los anteriormente citados, echo de menos una marquesina con sombra y una fuente en la zona de descanso existente, así como unos urinarios, y papeleras a lo largo del recorrido.
Ante el taxativo rechazo de liberalización del peaje en la AP-8, que redundaría en una menor afluencia de vehículos por la N-634, los cicloturistas, ciclistas urbanos, ciclodeportistas e incluso los ciclistas de competición gozamos ya de un buen recurso para circular con mayor seguridad utilizando la bici-pista. Ningún amante del pedal que se precie tendría que desdeñar esta opción, también los fines de semana, me atrevería a decir. Partidarios o no de su construcción, hecha está, con nuestro dinero, razón de más para que sepamos sacarle partido, incluso por la noche.
No es menos cierto que, si han existido personas corrientes ansiosas por poder practicar el deporte de la bicicleta en mejores condiciones y garantías, otra mucha gente usuaria de vehículos a motor, por obligación o por capricho, se han quitado de encima durante un rato, la incomodidad que les supone esta plaga que diariamente lograba crisparles los nervios.
El éxito dependerá de varios factores, referidos a su buen uso, a cierta vigilancia ocasional y al mantenimiento, pero el mayor logro sería su utilización como un recurso para desplazarse a los centros de trabajo, objetivo que actualmente no aparece entre nuestras prioridades, aunque este punto no estaba descartado en la declaración de intenciones del proyecto cuando se citaba en la planificación, el propósito de unir centros urbanos con polígonos industriales.
Si en un período de cinco años conseguimos esto último, no será un éxito, será un milagro.