Dame pan y dime tonto

El título de mi primera columna en este medio, además de ser el de una canción de uno de los grupos de referencia en mi juventud, es la manera en la que algunos partidos políticos tratan a la ciudadanía. Un buen ejemplo de lo que quiero expresar es la política de vivienda que (no) ha existido en Durango.

Un municipio donde prácticamente se ha agotado el suelo urbano y urbanizable, y nos deja el resultado de 1.000 personas apuntadas en Etxebide y 1.500 viviendas vacías. Durante los años de la burbuja inmobiliaria, prácticamente no se construyó una VPO, se fueron concentrando en terrenos que se han ejecutado en los últimos años o están sin ejecutar.

Con la crisis del ladrillo en plena eclosión se siguen ofertando en propiedad, que nunca ha sido socialmente justo, pero ahora ni siquiera es una opción para la mayoría de la ciudadanía por la falta de financiación, ya que las renuncias han aumentado un 150%. Y en los últimos 10 años, la cantidad que el PNV de Durango ha destinado a vivienda, del dinero que ha adquirido de los derechos que le correspondían en lo construido, asciende a la cantidad de 0 ???.

En este contexto, ahora que se debaten los presupuestos, escucharéis a los partidos que han ayudado al PNV a perpetrar esa no política de vivienda hablar de dinero para evitar los desahucios y de destinar 5 o 6 viviendas para familias desahuciadas.

Mientras tanto seguirán votando a favor de que se siga gestionando vivienda protegida en propiedad, que no se grave a las viviendas vacías por medio de las tasas municipales o que el dinero que se consigue de vender el suelo municipal se siga destinando a pagar agujeros de la mala gestión del PNV y no a vivienda.

Los veréis saliendo en los medios diciéndole a la ciudadanía que como les dan pan les pueden tomar por tontos.

Durangoko zinegotzia (EH Bildu).