Despedida

El de ayer fue mi último pleno en el Ayuntamiento. Es por eso que quiero aprovechar esta columna para reproducir las palabras que pronuncié para despedirme de mis compañeros y compañeras de Corporación y también de la ciudadanía.

Me he sentado aquí durante 20 años como concejala del Partido Socialista en la oposición, y los últimos 4 años lo he hecho como Teniente de Alcaldesa y responsable de varias Áreas Municipales. En este tiempo, he vivido de todo. Especialmente dulce ha sido esta última etapa en el Gobierno Municipal. Y lo ha sido por dos motivos:

El primero: por las buenas relaciones que he mantenido con la Alcaldesa Aitziber Irigoras y con la Teniente de Alcaldesa Mari José Balier y con el resto del Equipo.

Y en segundo lugar: porque he tenido la oportunidad de gestionar parcelas que me han interesado y apasionado: Igualdad, Personas Mayores, Empleo, Cooperación Internacional, Inmigración, Vivienda Protegida, y apoyo a las personas más necesitadas, entre otras.

Cuando llegué aquí era muy joven y venía con mucha ilusión a trabajar por mejorar mi pueblo. Puedo decir que este entusiasmo lo mantengo vivo hasta hoy, a pesar de que durante estas dos décadas he vivido también momentos muy duros: he visto cómo era asesinado un compañero de corporación, Jesús María Pedrosa, por el simple hecho de representar a unas siglas, y he sufrido yo misma la amenaza y el miedo. Lo quiero recordar hoy para que no se olvide, aunque afortunadamente estamos en una nueva etapa en la que espero que avancemos mucho más en el entendimiento entre diferentes.

Quiero agradecer a todos los compañeros y compañeras de corporación con los que he compartido todos estos años sus aportaciones; sus críticas, que me han ayudado a mejorar; y también su compañerismo y complicidad en otros muchos momentos.

También quiero reconocer el trabajo y dedicación del personal del Ayuntamiento, especialmente el de aquellas personas con las que me he relacionado más directamente y he tratado más en el día a día. Gracias a todos y todas

A los periodistas y las periodistas que tratáis a diario la actualidad municipal, gracias.

Y por último, puedo decir sin ninguna duda que echaré de menos el Ayuntamiento y que, en lo sucesivo, como ciudadana de a pie, seguiré contribuyendo en la medida de posibilidades a mejorar Durango, mi pueblo. Un pueblo al que me siento encantada de pertenecer y al que he servido y representado con orgullo.

Agur bero bat eta ekerrik asko danori.

Pilar Ríos es concejala en Durango (PSE-EE).