Este domingo se
disputó la final de la Copa
del Rey de baloncesto. Desde un
sorteo que cada vez parece menos
marcado por el azar, todo
parecía estar orientado a
una final Real Madrid-FC Barcelona
y así fue. En la previa los
analistas y tertulianos daban al
conjunto azulgrana como favorito
pero luego eso hay que
demostrarlo en la pista y el equipo
madridista pasó por encima
al que ejercía de
anfitrión y el gran
artífice de este gran logro
blanco es Pablo Laso.
Pero hasta coronarse
campeón de Copa, Laso ha
tenido que pasar un duro
exámen en cada encuentro.
El que fuera base baskonista y del
Real Madrid llegó este
verano al banquillo blanco rodeado
de incertidumbre, casi nadie
creía en él.
Mantener en la categoría al
modesto Lagun Aro no
parecía bastante
currículum para dirigir la
nave madridista. A los de la capital
les gustan los técnicos con
pedigrí y Pablo lo tiene por
familia pero aún no
tenía el bagaje de los Željko Obradovi??,
Sergio
Scariolo, Javier
Imbroda, Božidar Maljkovi?? o
Ettore
Messina, que en su día
estuvieron al frente del equipo
pero que por cierto fracasaron en el
intento de sumar el
vigésimotercer título
copero a las vitrinas del Real
Madrid. 19 años
después el gasteiztarra lo
ha conseguido.
Pablo Laso ha decidido apostar
por el baloncesto ofensivo, alegre,
que no racanea en su juego, que
tira muchas veces a canasta, que
corre, que realiza un juego
físico pero también
técnico y que deja margen
a la genialidad y creatividad de sus
jugadores, jóvenes con
talento que se equivocan y aciertan
pero que tienen margen de error.
Enfrente un Xavi Pascual que
parece haber dejado atrás
su origen humilde, con una
plantilla extensa, tanto que
está formada por 13
jugadores y se permite el lujo de
dejar fuera de la convocatoria a un
jugador en cada encuentro que en
cualquier otro equipo ACB
sería titular indiscutible. El
técnico de los azulgranas
ata a jugadores de un talento
enorme a un sistema, a un ritmo,
a la pizarra, de manera excesiva.
Para mí Pascual
quemó a Ricky Rubio y no
sé si hará lo mismo
con Eidson o Rabaseda -con
Navarro no puede porque es
extraordinario-. En la final, el
entrenador catalán se
equivoca emparejando a la
???Bomba??? con
un Carroll que le hace un
traje al escolta barcelonista en el
último cuarto, se olvida de
Fran Vázquez
muchísimos minutos y no
sabe cómo parar a Llull
???a día de hoy me
parece imparable-, también
se queda sin ideas en ataque por
mucho que recitaba
números y nombres de
jugadas en los tiempos
muertos???
Hace una semana me
topé en la puerta del
Ramiro de Maeztu (la casa de
Estudiantes) con el director de la
revista especializada en baloncesto
más famosa del Estado y
me decía que el Real
Madrid iba a tener muy complicado
ganar títulos, que el FC
Barcelona sabe que tiene la llave y
esa no debe de ser otra que jugar
a diferentes ritmos, parar, controlar
el juego, y que los blancos no
pueden hacerlo. Que los grandes
de Europa ganan las
últimas Final Four de esa
manera??? Pues de momento
el Real Madrid ya tiene un
título y el FC Barcelona
cero. Demasiados gurús,
¿no creen?
Este domingo la genialidad
blanca desmontó el juego
encorsetado a una pizarra del FC
Barcelona. Pascual va a salir
cuestionado de esta Copa y, por si
las moscas, que Pep Guardiola
tome nota???