Margaret Thatcher, fuente de inspiración

Hagamos un poco de historia para entrar en materia. La citada lady llamada justamente la “Dama de Hierro” fue durante 11 años, los que van de 1979 a 1990, Primera Ministra del Reino Unido. Liberal hasta las cachas, puso en marcha una política de privatizaciones de empresas estatales, medios de ayuda social (área de salud entre ellos) y de educación.

Pero esta dama fue más lejos ya que redujo el poder de los poderosos sindicatos hasta límites insospechados. Flexibilizó el mercado laboral (no hace falta decir a favor de quién), desregularizó el sector financiero y recordemos que en lo referente a las privatizaciones de las empresas estatales, estas alcanzaron cotas inimaginables.

Vean si no. Leyland, British Airways, British Steel, Rolls-Roice, sistema de salud, correos, aeropuertos, astilleros, ferrocarriles, autobuses, electricidad, petróleo, agua…..todas esas empresas y sectores fueron privatizados. En fin, que no dejó títere con cabeza. Su línea argumental para producir este terremoto fue que “la empresa pública no es competitiva y esa carencia  hace que aumente la deuda del Tesoro y además sus decisiones siempre están marcadas por consideraciones políticas”.

Pues bien, toda esa filosofía liberal llevada a los extremos citados, inspiró a las autoridades de nuestro flamante Servicio Vasco de Salud, otrora llamada “la Joya de la Corona”, a poner en marcha el Plan Osasuna Zainduz en 1993, 9 años después de la fundación de Osakidetza, plan que modificó de manera sensible la gestión de la salud pública vasca.

Han transcurrido –el tiempo pasa rápido– 30 años desde la puesta en marcha del citado Plan y desde aquel entonces las privatizaciones de medios y servicios en Osakidetza ha sido un constante goteo, disimulado, cuando no ocultado, lo que ha dado origen a una pérdida de calidad de Osakidetza a todas luces visible. Tan es así, que la ciudadanía ha percibido claramente esta pérdida de calidad en los servicios de Osakidetza hasta el punto de que la misma ha pasado a ser un importante motivo de preocupación.

OSEKI, institución fuera de toda sospecha, ha afirmado que “la llegada de la corriente liberal a principios de la década de los 90 se materializó en el Plan Osasuna Zainduz” al que antes hemos hecho referencia.

Las consecuencias de esa política neo liberal que impregna el Plan se manifiestan claramente a través de los siguientes datos.

1) La demanda de sanidad privada aquí, en el País Vasco, ha alcanzado la cifra más alta en 30 años.

2) El aterrizaje entre nosotros de Adeslas (que se ha hecho con el 70% de IMQ), Quirón y Sanitas, es consecuencia de que están cubriendo los espacios que está abandonando Osakidetza.

3) 475.000 vascos, 1 de cada 5, tienen seguridad privada y vive dios que esta no es nada barata. Esa cifra sería notablemente mas baja si obtuvieran de Osakidetza las prestaciones adecuadas a sus necesidades.

4) Las listas de espera para ser atendidos por especialistas, que es uno de los índices que define la calidad sanitaria pública, no para de crecer, hasta el punto de que hay del orden de 150.000 ciudadanos vascos esperando ser atendidos, lo que a mi modo de ver es un auténtico escándalo.

5) Igualmente la lista de espera para realizar pruebas diagnósticas ha superado el doble de la que existía hace 3 años.

6) Más de 23.000 vascos están pendientes de ser llamados para ser operados.

Y toda esta evolución negativa que tiene su origen en la adopción de la “política thatcheriana” se ha hecho a la chita callando por parte de nuestros dirigentes políticos que para tapar los datos negativos que se derivan de la misma no han tenido empacho en gastar millones de euros intentando dar una imagen de calidad a través de distintos medios que no se correspondía ni de lejos con la realidad.

Pero rizando el rizo, y como dicen los gallegos “aínda máis”, ya que estas campañas propagandistas fueron contratadas a través de agencias y medios vinculados al PNV.

Rafael Hidalgo