Nuevo curso, nuevas expectativas

Bueno… ya estamos de vuelta. En realidad ya hace bastantes días que ha comenzado para mí “el nuevo curso” y con él la intención de comenzar una nueva andadura en la que toca hacer limpieza general y tirar por la ventana (metafóricamente) todo lo que sobra, para quedarnos con lo importante.

Fuera las comeduras de tarro que no conducen a ningún sitio. Los enfados y rencores duraderos, fuera también. Mandemos al garete el orgullo si nos impide pedir ayuda. Patada a la ingratitud, que demasiadas veces nos impide darnos cuenta de tanto como tenemos. A la fosa más profunda la intolerancia y la falta de respeto.

En cambio, sí que habrá que aprovisionarse de buenas dosis de humor. Unas cuantas raciones de cariño, que bastante sequedad y dureza hay por ahí. No hay que dejar marchar la esperanza de que Durango, Euskadi… el Mundo crezcan en solidaridad. Tendremos que llevar también valores, metas, sueños, proyectos…. Y darnos el gustazo de convivir todos definitivamente en Paz.

Dentro la familia. Y los amigos. Y los que necesiten nuestra ayuda. Dentro la alegría. Los abrazos. Dentro el deseo de lo bueno, la capacidad de perdonar y la humildad para nunca dejar de aprender.

Y siempre, siempre  capacidad de discernir en libertad, para tener criterio propio  ante las  incoherencias y los ejemplos de disociación entre las ideas que se proclaman y los actos que se llevan a cabo. Compromiso para demostrar nuestros valores más con hechos que con palabras porque, como casi siempre, en lo personal nos queda dar un paso atrás y revisar nuestro camino. Y en lo político, conseguir separar el trigo de la paja… algo que se hace difícil cuando abunda la paja y escasea (salvo excepciones) el trigo.

Isidoro Sánchez es responsable de Administración y Servicios de San José Jesuitak Ikastetxea