Pasar a la acción

Instalar fuentes públicas, plantar árboles, poner un banco o diez bancos en una plaza o alumbrar calles son decisiones políticas. Muchas veces escucho a alguien decir que la política no le interesa, que no va con él o ella. Sin embargo, las decisiones políticas condicionan nuestro día a día. Tiene que ver con el tipo de municipios que queramos construir. Tiene que ver con si queremos un Durango amable, en el que las personas que viven en la villa se sientan cómodas y acogidas, o si, por el contrario, un Durango desapacible, en el que importe más el negocio que sus habitantes.

Las personas tenemos derecho a la ciudad, a socializar, a manifestarnos, a llevar a cabo proyectos vitales. Debemos reivindicar ese derecho frente al modelo del PNV, basado en líneas de alta tensión, ladrillazo, vertederos e infraestructuras que están vacías porque han desmantelado los servicios que se ofrecían en ellas.

La razón de ser de Podemos es defender vidas mejores para nuestras vecinas y nuestros vecinos. Cada vez que alguien pelea por los servicios públicos, está defendiendo nuestra razón de ser. Porque defender lo público es fortalecer la democracia y avanzar en justicia social. Sin embargo, esa defensa de lo público no basta con que se quede en los centros de trabajo o en la barra de los bares, sino que también debe hacerse en las instituciones. Porque, cada vez que Podemos registra una iniciativa en un Ayuntamiento, en las Juntas Generales de Bizkaia o en el Parlamento Vasco, está dibujando el horizonte que la gente necesita y merece.

Podemos nació de la gente, de la calle, de las plazas que alzaban la voz contra los privilegios de unos pocos, contra los recortes sociales y defendía vidas dignas. Seguimos luchando por lo mismo desde las instituciones e insistiendo en que somos las vecinas y los vecinos quienes hemos de tomar las decisiones que afectan a nuestro municipio. Debemos organizarnos para poner en común nuestras ideas y trabajar conjuntamente en la construcción de nuevas formas de vivir, donde podamos remunicipalizar servicios para hacerlos accesibles a todo el mundo y para que el personal de los servicios públicos tenga mejores condiciones de trabajo. Porque no siempre basta con tener razón, a veces hay que tomar partido y pasar a la acción. Y eso es hacer política.

Las ciudades y los pueblos deben seguir siendo lugares amables en los que la gente quiera vivir. Eso es por lo que debemos luchar. En esa resistencia está la importancia de la política municipal, el derecho a hacer de nuestros municipios el lugar que deseamos. Eso es política. Algo que nada tiene que ver con el ruido mediático y el espectáculo que cada día está generando mayor desafección y rechazo hacia gran parte de la clase política.

David Hernández es periodista y candidato de Podemos a la alcaldía de Durango.