El ‘procés’ que también se vive desde Durangaldea

Detenciones, registros, cuentas intervenidas, papeletas confiscadas… El camino hacia el 1-O está resultando sinuoso, aunque no infranqueable. Al menos, así lo creen Aurora Julià, Clara Barbero y Jaume Plans, tres catalanes que residen en Durangaldea y que están viviendo su propio ‘procés’. Los tres coinciden en que es un momento histórico, una revolución irreversible y que la represión que se está viviendo estos días en Catalunya alienta aún más esos anhelos de independencia.

Frente a la pregunta “¿Quiere que Cataluña sea un estado independiente en forma de república?” que se plantea para el domingo, ante las urnas, este es el cuestionario que desde durangon.com les planteamos:

“Catalunya lleva mucho tiempo pidiendo más autogobierno y menos injerencias”

Aurora Julià Gabarró dice ‘sí ‘ a una República que permita a Catalunya empezar de cero sin corrupción y con una democracia participativa. La naturópata y homeópata de Abadiño considera que, ante los horizontes “recortados”, sólo les queda el camino de la dignidad.

1. En este momento histórico excepcional me gustaría estar allí, estoy conectada. Mi corazón late al unísono con tantas personas que se manifiestan indignadas por la falta de democracia, pero salen a la calle tranquila y pacíficamente para reclamar el Derecho a decidir. Y quieren votar y están muy concienciadas. Es una revolución, de abajo hacia arriba y de forma transversal. Me siento muy orgullosa de ser catalana, de mi país y de mi gente.

2. Mi familia, mis amistades y contactos en general, reconocen la importancia histórica de este momento. Salvo algunas excepciones, están dispuestas a salir a la calle las veces que haga falta, a pegar carteles, a dar claveles a la Guardia Civil, a reclamar el derecho irrenunciable a votar, a decidir su futuro. Lo hacen por sí mismas, por su descendencia y por sus antepasados. Están ilusionadas, ven una salida a tanto agravio, tanta ridiculización, tanta mentira vertida desde las cloacas del Estado y sus medios de comunicación.

3. Con lo dicho, creo que está muy claro. Votaría un rotundo SÍ. Sí al progreso, al cambio, al futuro, a la ilusión, a un Estado nuevo donde se abre todo un abanico de posibilidades. Sí a la República. Sí a empezar de cero sin corrupción, con una democracia participativa y no representativa.

4. Yo no veo fractura social. Estos relatos y la historia los escriben los vencedores. Los catalanes somos un pueblo curioso. En cada Diada, el 11 de septiembre, conmemoramos la derrota de 1714, cuando el ejército borbónico de Felipe V entró a sangre y fuego en Barcelona y nos asimiló. Digo esto porque viene de antiguo. En Catalunya se lleva mucho tiempo reivindicando más autogobierno, más dotación económica, más respeto y menos injerencias del Estado. En 2005 se aprobó en el Parlament un nuevo Estatut por mayoría absoluta, y fue refrendado en 2006. Y el PP, con Rajoy a la cabeza, recogió 4 millones de firmas en contra. Cuatro años después, en 2010, el Tribunal Constitucional –que va rápido o lento según interese a quien manda- lo recortó y le pasó el cepillo, como se jactó Alfonso Guerra. Ante esto, con los horizontes recortados ¿Qué camino seguir? Solo nos queda el camino de la dignidad.

5. Las condiciones no son óptimas, claro. Tenemos a la Policía Nacional y a la Guardia Civil al acecho, a la caza y captura de carteles, papeletas y urnas, en el barco de Piolín. Alcaldes llamados a declarar, instituciones registradas con documentación incautada, las cuentas de la Generalitat intervenidas, detenciones…Y un Gobierno que habla de democracia pero donde no hay separación de poderes y dicen querer diálogo con la boca pequeña, con líneas rojas y acotamientos…

6. Estoy encantada con las muestras de solidaridad de la gente. Estuve en la manifestación de Bilbao del domingo 16 y fue emocionante estar con 30.000 personas y ver tantas esteladas junto a ikurriñas. ‘L’Estaca’ cantada en euskara y catalán, impresionante. También quiero destacar las concentraciones de solidaridad en pueblos de la comarca.

7. Creo que la gente irá en familia o en grupo, a pasar el día, a los centros de votación habilitados. Si podrán votar, ya se verá. Pero las movilizaciones masivas han merecido la pena. Del Procés y del Derecho a decidir hablan en toda Europa y también de la involución democrática y la represión del Estado español. Lo importante será lo que suceda a partir del 2-O.

“Estamos en un punto de no retorno”

Clara Barbero Camps es una matrona que hace ya unos años que se trasladó a vivir  Durangaldea desde su Girona natal. En su caso, no está de acuerdo con que haya ningún tipo de fractura social -sí con el Estado- y cree que la relación entre Catalunya y España es “irreconciliable” si no se respeta el derecho de autodeterminación.

1. Lo estoy viviendo con mucha emoción al ver la cantidad de gente que se moviliza y su actitud alegre, firme y combativa. Al mismo tiempo con pena por no estar allí en este momento histórico. Me mantengo informada a través de la familia y amigos y de los medios de información catalanes que considero que están dando una información más veraz y objetiva de la que están aportando los medios de comunicación españoles.

2. Mi familia y amistades están comprometidas con el referéndum. Me explican que no hay fractura social, conviven perfectamente personas con opiniones diferentes, hay respeto. Esto si, la mayoría de la población está a favor del referéndum. La gente quiere poder decidir, poder votar sí o no, pero votar, y cada vez hay más gente movilizada. La fractura existente es con el Estado español. La prueba más evidente es que los partidos contrarios al referéndum no consiguen que la gente salga a la calle. Las personas no independentistas saben que la postura del Estado es indefendible; no es democrática.

3. No podré votar porque estoy empadronada aquí pero votaría sí a la democracia, sí a los derechos sociales, a la igualdad entre mujeres y hombres, a la soberanía, a la protección y promoción de la lengua y cultura catalanas, a la República… Sí a construir un nuevo país. Sí a la independencia.

4. Más que fractura social hay que hablar de fractura con el Estado español.  Y los principales culpables son el PP, el PSOE y el Tribunal Constitucional, que recortaron un estatuto que había sido aprobado por referéndum. Entonces el estatuto ya no era el que había votado la ciudadanía. Este fue el detonante del aumento del independentismo, ya que históricamente siempre ha habido un maltrato hacía Cataluny por parte del Estado Español y un trato desigual e injusto respecto a las otras comunidades autónomas.

5. Es la misma gente que no ha querido negociar, ni pactar el referéndum como se haría en cualquier país democrático. Tienen miedo a que el pueblo decida libremente. Primero niegan el derecho a decidir, después actúan represivamente para que el referéndum no tenga las garantías necesarias y finalmente desvalorizaran el resultado de este referéndum.

6. Hace un tiempo me parecía que se hablaba poco del proceso, pero el último mes con los ataques del Gobierno español y con el acercamiento al 1 de Octubre sí he sentido respaldo y  calidez. Aprovecho para decir: Eskerrik asko Euskal Herriari!

7. Creo que la gente saldrá a votar masivamente.  No sé si les dejaran hacerlo, pero creo que estamos en un punto de no retorno.  Pienso que la relación entre Catalunya y España es irreconciliable si no se respeta el derecho de autodeterminación.

“La gente está convencida de que votará”

Jubilado y ornitólogo aficionado, Jaume Plans Girvent sí se desplazará el domingo a Catalunya a votar. Sus convicciones son firmes y apuesta claramente por una República donde se priorice “la igualdad, la justicia social y se persiga implacablemente la corrupción y todo tipo de actitudes fascistas”.

1. Hoy en día no hay distancias, la comunicación es permanente y al momento. Sí que es cierto que si estás presente como en el día 11, que estuve en Barcelona, aumenta la vivencia por una carga emocional al ver tanta gente comprometida que solo estando allí lo percibes.

3. Participaré en el referéndum y mi voto será un Sí.

4. El único responsable de que la situación haya llegado al límite es el Estado Español y el gobierno del PP ; su discurso es esperpéntico, antiguo, decimonónico, trasnochado… De no querer entender nada e insistiendo en que es un invento de la derecha catalana. Lo que ocurre en Catalunya empezó por un movimiento de base y transversal ante la desconfianza hacia los partidos políticos para que no secuestraran ilusiones y  para que no se desviaran  del mandato que les dieron las urnas y que es… un referéndum.

En cuanto si ha supuesto una fractura social , lo más recomendable es ir allí y comprobarlo directamente. Al contrario, creo que cada día hay más gente ilusionada con este proyecto alegre, festivo, pacífico, democrático, ilusionador, comprometido… y queremos una República donde se priorice la igualdad, la justicia social, se persiga implacablemente la corrupción y todo tipo de actitudes fascistas. Catalunya siempre ha sido una sociedad comprometida , solidaria y acogedora.

5. Las condiciones en que se hará el referéndum son difíciles, pero, a pesar de todo, la gente está convencida de que votará. Cada día que aumenta la represión aumenta la convicción de que es necesario votar

6. En cuanto a si Euskal Herria debería  involucrarse más, pues no sé qué decir, pero creo que sí . La verdad es que la información que llega aquí a través de los medios es francamente poca y a menudo sesgada, cuando no interesada y tergiversada.

7. Lo que es seguro es que habrá una monumental movilización y, pase lo que pase, creo que el Estado español quedará muy tocado. Eso, sin contemplar la posibilidad de la actitud que tomen los miles de agentes de los cuerpos de seguridad que han desplazado. Y en el supuesto de que no haya referéndum , quién y cómo y con qué autoridad gestionarán el día 2 y 3 y siguientes?
Lo que sí han conseguido ya es una desconexión de la gran mayoría de catalanes  con el Estado español, que no con los españoles.