El tramo de la calle San Miguel, a la altura del barrio de Jauregizahar, permanece cerrado desde el pasado 14 de marzo debido al riesgo de hundimiento de la calzada. A pesar de que la zona está acordonada, el Ayuntamiento de Amorebieta-Etxano tiene constancia de que algunas personas han accedido al área afectada, por lo que ha vuelto a recordar que “sigue prohibido el acceso por motivos de seguridad”.
Durante este fin de semana se ha detectado, además, la aparición de una nueva grieta en la zona afectada, lo que ha provocado un mayor hundimiento del firme. Esta situación podría repetirse en otras zonas del tramo cerrado, por lo que se insiste en la necesidad de respetar el perímetro de seguridad.
Desde que tuvo constancia del hundimiento de la bóveda situada debajo de la carretera N-634, responsables municipales señalan que se trabaja “sin cesar” para “dar una solución definitiva a la actual situación”. Para ello, en primer lugar, procedió al cierre del tramo afectado y a la reorganización del tráfico, incluyendo el traslado de las paradas de autobús.
Posteriormente, los servicios técnicos municipales realizaron una inspección en profundidad y confirmaron el colapso parcial de la bóveda de piedra por la que pasa el arroyo San Martín. Este deterioro estructural afecta directamente a la calzada y podría agravar el riesgo de inundaciones en el entorno, especialmente en caso de lluvias intensas.
Vía de emergencia
Con estos informes sobre la mesa, el Ayuntamiento tramitó la contratación de un proyecto de reparación por vía de emergencia. La empresa de ingeniería adjudicataria ya ha comenzado los trabajos para definir una solución técnica que garantice la estabilidad de la estructura y la seguridad de la vía. Además, se está trabajando en coordinación con la Agencia Vasca del Agua (URA), que deberá validar la propuesta final antes de que se puedan ejecutar los trabajos de reparación.
Mientras tanto, desde el Consistorio zornotzarra se recuerda que el cierre de la calle responde exclusivamente a criterios de seguridad y que acercarse al entorno del socavón puede resultar peligroso.