El Ayuntamiento de Durango ha talado el tilo cuyas frondosas ramas cayeron hace una semana sobre el parque infantil de San Ignacio auzunea como consecuencia del viento. Era la segunda vez que ocurría.
La tala se llevó a cabo el jueves siguiendo las recomendaciones de un informe que advertía que el árbol, de gran tamaño, se encontraba en malas condiciones. “De hecho, antes de que volviera a caer el pasado sábado, ya teníamos programada su tala”, apunta la teniente de alcalde Mari Jose Balier.
Este estudio se realizó después de que fuertes rachas de viento partieran el tronco del tilo por primera vez el pasado 13 de febrero. En aquella ocasión, las ramas del árbol cayeron sobre los juegos infantiles del barrio, destrozando uno de ellos.
El sábado, el tilo volvió a ceder y cayó hacia la parte de la cancha de juego y las mesas de ping pong. Afortunadamente, en ambos casos, las ramas cayeron de madrugada sin que hubiera nadie en el parque infantil en esos momentos.
Bases inestables
Este no es el único árbol de San Ignacio auzunea que se encuentra en malas condiciones, según el informe que el Ayuntamiento encargó en marzo. Los expertos advierten de que también hay un roble y un fresno con problemas fitosanitarios, además de varios tilos más con bases inestables y defectos en sus ramas debido a su gran tamaño.
A fin de reforzar su seguridad, el Ayuntamiento podará algunos de estos árboles.