
La Pasión de Durango ha resurgido con fuerza tras el difícil momento que atravesó hace unos meses. Hubo quien pensó en tirar la toalla, pero la nueva junta de la asociación Juan de Iciar ha aportado ideas y trabajo para que el espectáculo siga siendo uno de los protagonistas de la Semana Santa local. Y también de la de Bizkaia ya que, tras la reciente desaparición de la de Arkotxa, solo quedan las de Balmaseda y Durango,
Ya lo advirtió Rosa García, una de las artífices de la nueva etapa, en vísperas de las representaciones. “La gente está mucho más implicada. Hemos tocado corazones y conciencias, y somos un grupo con los brazos abiertos que está deseando acoger nuevos integrantes. Ha venido gente que no había participado en su vida; hemos recibido donaciones; hay nichos recogiendo dinero con sus huchas, y la gente más joven está dispuesta a seguir muchos años. No se puede pedir más”, resumía.
Esta ilusión también la han podido sentir en primera persona Egoitz Iraurgi y Susana Alarcón, que han asumido los papeles de ‘Jesús’ y ‘María’. Ambos forman parte de la renovada junta directiva y están convencidos de que el espectáculo tiene futuro. “Nosotros lo vemos como un acto cultural, como una actividad más de las muchas que se hacen en Durango, pero lo que más te anima es ver que este año ha participado más gente en la obra. La situación económica era difícil, pero salvable, por eso decidimos echar para adelante. Vimos de dónde poder recortar y se han buscado más ingresos”.
En cuanto a los personajes que representan, los dos están contentos del resultado. Egoitz es la quinta vez que encarna a ‘Jesús’, por lo que está relativamente tranquilo. “Siempre tienes esos nervios antes de la función, pero son buenos”, admite este troquelista de 29 años.
“Que disfrute y esté tranquila”
Veterano en la Pasión, es consciente del esfuerzo físico que supone protagonizar la obra, pero lo afronta sin mayores preocupaciones. Es más, ha optado por un ‘Jesús’ más estoico que no se lamenta ni se cae al suelo mientras porta la cruz y recibe los latigazos. “Él sufrió en silencio y prefiero aguantar sin tirarme ni hacer gestos de dolor”, apunta.
En el caso de Susana, matemática de 44 años y socia de Ingartek Consulting, ha sido su debut en un papel con texto. “Me ofrecieron hacerlo y como no sé decir no…”, bromea. Lo que más le han aconsejado otras integrantes de la Pasión que han asumido el papel de ‘María’ es que “disfrute, que es algo que te queda para siempre”, y que esté tranquila, “porque la emoción y el sentimiento te llegan, casi sin necesidad de forzarlo”.
Susana y Egoitz afrontan esta noche, a las 21.00 horas, su tercera y última representación con público. Alea iacta est.