El sindicato LAB aprovechó la jornada de ayer, Día Internacional de la Salud Laboral, para denunciar la “dramática situación” de la plantilla de Fumbarri, con casi el 20% de los trabajadores diagnosticados de silicosis, asegura. Docenas de personas secundaron una concentración y una marcha por las calles de Durango para exigir a la empresa la implantación urgente “de medidas preventivas que eviten que nadie más enferme”.
La movilización del sindicato comenzó con una caravana de coches por Ermua, Amorebieta y Elorrio con destino en la fundición durangarra. Un vez allí y provistos de equipos de protección personal, realizaron una concentración frente a la empresa para dirigirse, a continuación, hasta la plaza de Ezkurdi para leer un manifiesto.
Juan Carlos Larrinaga, delegado de prevención en Fumbarri, describió la dura situación a la que se enfrentan sus compañeros que padecen esta enfermedad “que se está extendiendo de manera alarmante en la empresa”. “Desde 2011, son ya 15 las personas con silicosis en una plantilla de 85, pero sabemos de gente ya jubilada que también la sufre”, denunció.
Entre los afectados se encuentra Jon Ugarte, delegado sindical de LAB, que hace 5 años supo que había contraído la enfermedad. “No es sólo el perjuicio para la salud que supone. Para nosotros es muy duro ir a trabajar a un puesto en el que sabes que las medidas de seguridad no son las adecuadas”, lamenta.
Espada de Damocles
La silicosis es “irreversible, lo mejor que nos puede pasar a los afectados es que no se desarrolle más. Y acudir, día tras día, a una empresa en la que está presente el sílice hace que aumente la presión y siempre vamos a hacernos las revisiones anuales temiendo que la enfermedad haya empeorado. Vivimos permanentemente bajo una espada de Damocles”, relató.
El sindicato CCOO se ha unido a la reclamación de LAB alegando que “la salud de los trabajadores y trabajadoras no está a la venta”. Las condiciones de trabajo existentes en la empresa “desde hace más de una década provocan un continuo goteo de trabajadores que enferman de silicosis cada año, goteo que se va a prolongar durante muchos más años”, han advertido.
La dirección de Fumbarri, ante esta situación, “no sólo no pone en práctica un plan integral para mejorar las condiciones de trabajo, sino que se niega a la participación y aportación de los Delegados de CCOO, demostrando así, cuál es el interés de la empresa por la salud de sus trabajadores”, han criticado.
Oso ondo esanda ion eta larri. Animo fumbarriko langilei!