
Un desprendimiento de tierras, rocas y árboles ha provocado el corte en ambos sentidos del tráfico en el alto de Trabakua de Mallabia. Las tareas para despejar la vía podrían prolongarse hasta 2 semanas, según estima la Diputación.
La caída de la ladera sobre la BI-633 ha comenzado a primera hora de esta mañana y se ha ido agravando según han avanzado las horas.
En un primer momento, se ha procedido al rastreo de la zona para determinar la existencia de algún vehículo afectado, pero según han informado desde el Departamento de Seguridad, no se han notificado daños personales.
1.000 metros cúbicos desplazados
La BI-633 permanecerá cortada las próximas dos semanas mientras se limpian, evalúan y reparan los daños causados por el desprendimiento, según ha anunciado la Diputación de Bizkaia. Mientras se prolongue el corte de la carretera, la conexión entre Durango y Markina deberá realizarse por la autopista hasta o desde Ermua.
Técnicos del departamento de Infraestructuras y Desarrollo Territorial han informado de que el desprendimiento ha arrastrado más de 1.000 metros cúbicos de material, provocando la rotura de un terraplén que a su vez está ocasionando grietas en la carretera.
La retirada del material arrastrado va a requerir varios días de trabajo y los equipos técnicos seguirán evaluando el alcance de los daños y los recursos necesarios para subsanarlos y que la vía vuelva a entrar en servicio con todas las garantías de seguridad.
Las explotaciones forestales con sus talas masivas de pinares dejan los terrenos desnudos sufriendo una erosión brutal por las lluvias provocando muchas veces este tipo de derrumbes como ocurrió recientemente en la línea de tren entre Beasain y Brinkola. Se mira
solo el dinero rápido sin ver más allá. No vamos bien.
Resta dinero de mantenimiento de carreteras para un tren de alta destrucción suma mucha lluvia y catástrofe asegurada.
Para supuestamente ir de Donostia a Bilbo 20min más rápido en un supuesto tren. Hoy para ir de Berriz a Markina una hora más.
Serán más bien dos meses. Estamos acostumbrados.