Un vecino de Elorrio denuncia
el robo de un rebaño de 39 cabras
‘azpi gorri’ en Berriz

“El disgusto que tengo es enorme. Es una putada porque llevaba quince años dedicándome a esta actividad y me han dejado sin nada”.  Con esa sensación de impotencia se expresaba esta mañana el elorriarra Javier Alberdi, a quien le han robado un rebaño de 18 cabras, dos chivos y 19 cabritos, todos ellos de la raza autóctona ‘azpi gorri’.

El ganadero se percató del robo el pasado sábado, cuando se dirigió a la cuadra que tiene en la zona de Las Planchas, en la carretera que llega al alto de Areitio, a un par de kilómetros del convento de las Mercedarias de Berriz.

“Hacia las nueve y media del viernes nos fuimos de la cuadra y cuando volví a las ocho y media del sábado con un saco de pienso para los caballos, ya no había cabras. Todas habían desaparecido”. El autor o autores del robo se llevaron los animales, las cadenas con las que estaban atados y dos sillas de montar, “un de ellas muy buena”.

Alberdi cifra el valor de lo sustraído en “más de 5.000 euros, porque cada cabra se paga entre 200 y 300 euros y entre todos los cabritos rondarán el millar”. Este  mismo fin de semana tenía previsto sacrificar una decena de ellos en el matadero de Oñati para ser vendidos en Eibar.

Cantabria y Asturias

A pesar del considerable perjuicio económico que ha supuesto el robo, el afectado reconoce que más que el dinero lo que le ha provocado un mayor malestar es la sensación de impotencia. “Antes tenía algunas yeguas pero lo dejé y comencé a dedicarme a las ‘azpi gorri’. Ahora son mi hijo y su novia quienes tienen algunos caballos”, aunque a él le han dejado sin su afición y su ilusión.

Alberdi sospecha que su rebaño puede estar actualmente en Cantabria o en Asturias. Sin embargo, tiene pocas esperanzas de recuperarlos “a pesar de que las cabras y los chivos están perfectamente identificados”. Al tratarse de animales robados, quien los tenga ahora no los va a dar de alta, aunque es posible que lo haga con las futuras crías y así lograr legalizarlas.

Pesimismo

Aunque el mismo sábado interpuso una denuncia ante la Ertzaintza, el pesimismo sobre su posible recuperación es absoluto. El número de animales recuperados tras un robo es muy pequeño, aunque “en algún caso han aparecido uno o dos ejemplares pero al de uno o dos años”, asegura.

El ganadero es un asiduo expositor de la muestra que cada año se organiza en septiembre en la Ferixa Nausiko de Elorrio y forma parte de la asociación de criadores de ‘azpi gorri’ por lo que sus animales están identificados, además de con el correspondiente crotal, con un chip ya que forman parte de un estudio genético que está desarrollando la entidad de la que forma parte.